martes, 11 de mayo de 2010

No pensar


No pensar. Fue la meta que un día me di cuenta que me había impuesto.

No se con exactitud cuando ni porque.

Mi mente se apagó, mientras leía un libro de relatos urbanos del gran Pablo Palacio. Leia y mis ojos empezaron a fallar, me sentía cansado agotado. Lo único que quería era acostarme. Hice un esfuerzo muy grande para acabar el cuento, lo hice sin entenderlo mucho. Salté a mi cama y me quedé dormido. Al siguiente día intenté continuar con el siguiente cuento, peor no lo conseguí me quedé dormido. Ese fue el priemr indicador de uqe algo raro sucedía.

Después no conseguía leer nada. Todo lo hacía por inercía. entre en estados altamente depresivos cada vez que ntentaba usar la cabeza. Luego ya ni eso, tan solo respiraba. Era desesperante pero me sentía incapaz de hacer algo más. Cada vez que lo intentaba me quedaba dormido y mi teimpo pasaba.

Probé de todo, hasta irme de misiones, relacionarme con nueva gente. Pero todo quedaba igual. Incluso me acostumbraba. Debería dejar de usar el pasado porque todavía me considero en este estado. Aunuqe sentí un brillo de luz otra vez. Continué con el libro que había dejado hace tiempo. Y estoy escribiendo con ánimo otra vez.

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